MOVIMIENTO
Hay que mover la vida, hay que
menearla
como la cola de una lagartija.
Hay que alzarla como un paraguas rojo.
Hay que ensartarla en el tiempo
como un puñal de oro.
Y que huya la muerte con sus
dientes de plástico,
que corra infeliz,
que sienta escalofríos.
Hay que mover la vida
con un movimiento de tren imprevisible.
Que cruce las fronteras de lo mágico.
Que pague los pasajes definitivos.
Y en asiento de primera clase
observe su propia carrera por la ventanilla,
presurosa de una premura insufrible,
atareada en la perspectiva de lo último.
CONDICIÓN Y ALARIDO
Y me ha dado la gana
de ser libre de condición
y de alarido
al medio de la calle
hurtado el cetro a la canalla
oficialmente constituida en mí
me hago presente
Me vierto en mi dominio
de lujoso desvarío virginal
Productores ufanos de quimeras
lánguidos sacristanes
me devoran
Me urjo a lo contrito
y me doy vale de fracaso
triunfalmente acosada
sin menoscabo de lo simple
me convierto en gimnasta
me doy de golpes en el pecho
me transformo en ventana
y me columpio
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